Una de las promesas de campaña del presidente Andrés Manuel López Obrador fue que vendería el avión presidencial debido a los lujos que este tenía. A más de dos años de su toma de posesión el avión sigue parado y sin poder venderse.
En su conferencia matutina, el mandatario dijo que, a pesar de que existía ya la posibilidad de la venta del avión presidencial, ésta se ha retrasado debido a que es un avión de lujo, que fue modificado única y exclusivamente para el expresidente, Enrique Peña Nieto.
“Imagínense, comprar un avión que ahora no lo podemos vender porque es pues extravagante. Si fuese un avión normal no costaría trabajo venderlo, pero fue hecho para el presidente en turno.”
La aeronave en cuestión que fue hecha especialmente para uso del exmandatario, es “un avión que tiene posibilidad de transportar a 240 pasajeros lo convirtieron en un avión para 80, porque tiene recámaras y tiene oficina y sillones, así que no son las sillas de los aviones comerciales”.
En septiembre pasado, luego de celebrar un sorteo alusivo al “avión presidencial”, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que había ya dos compradores en puerta y una oferta viable. A casi tres meses de distancia, no lo consiguió.
Una rifa que no rifó nada
El pasado primero de diciembre, el mandatario afirmó que el avión presidencial ya se había rifado y lo presumió como un logro de su administración. Lo que se le olvidó mencionar es que el avión no fue rifado, sino se su valor simbólico. Además, el gobierno invirtió un millonada en organizar la rifa e incluso compró muchos de los boletos, luego que la gente no los comprara.
