Irán aprobó esta semana el uso de emergencia de la primera vacuna desarrollada en el país contra el COVID-19, así lo informó este lunes una televisora estatal. La autorización de emergencia fue aprobada después de que el país, una de las naciones del Medio Oriente más afectadas por el coronavirus, presentara problemas para importar suficientes vacunas.
El ministro de Salud Saeed Namaki dijo que “el “permiso para usar la vacuna iraní COVIran Barekat fue otorgado ayer”, reportó la televisora.
Teherán también informó que trabaja en una vacuna en cooperación con Cuba. Namaki indicó que esa otra vacuna se sumará al paquete de vacunación del país la próxima semana.
La investigación de vacunas ha tomado urgencia en Irán debido a que funcionarios afirman que las fuertes sanciones estadounidenses obstaculizarán los intentos de inoculación masiva de la República Islámica.
Aunque el país tiene acceso a las vacunas, incluso a través de su participación en COVAX, una iniciativa internacional creada para distribuir vacunas a países sin importar su riqueza, los bancos e instituciones financieras internacionales se muestran reticentes a lidiar con Teherán por temor a las sanciones estadounidenses.
Bajo las normas de COVAX, Irán podría tener vacunas para la mitad de sus 82 millones de habitantes.
El inmunizante, llamado “COVIran Barekat”, fue desarrollado por la Fundación de la Orden del Imán.
Según un responsable de ese organismo parapúblico, citado por la agencia oficial de noticias Irna, la vacuna empezó a producirse “a principios de junio” y desde entonces “unos tres millones de dosis” han salido de fábrica.
El COVID-19 ha causado más de 82 mil muertes y más de 3 millones de contagios en Irán, según las últimas cifras oficiales, aunque estas están subestimadas, según las propias autoridades.
Con información de AP y AFP