El emblemático Lago de Pátzcuaro, un importante depósito natural de agua y patrimonio histórico de México, se enfrenta a una problemática alarmante: cada año su nivel disminuye en 30 a 40 centímetros, lo que está teniendo un impacto significativo en la navegación y en la vida de las comunidades aledañas.
Embarcaciones y lanchas encalladas
El canal principal de navegación que conecta el Muelle General con la Isla de Janitzio ha experimentado una preocupante reducción en su profundidad. En el año 2020, la profundidad del canal era de 2.2 metros, pero en el presente año (2023), se ha reducido a tan solo entre 1 y 1.2 metros. Esta disminución ha generado dificultades para la navegación de embarcaciones, especialmente en la zona del Muelle General, donde los niveles de profundidad oscilan entre 55 y 25 centímetros. El resultado es que algunas embarcaciones y lanchas han encallado debido a la falta de agua suficiente para su desplazamiento.
Partes del lago ya han alcanzado niveles de secado extremos, con charcos de apenas 20 centímetros de profundidad. Las actividades comerciales, la pesca, el turismo y la venta artesanal han sufrido graves afectaciones en la región lacustre. Una de las islas, Urandén, está a punto de convertirse en península debido a la disminución del nivel del agua. Los habitantes se han visto obligados a construir puentes de madera para mantener la conexión, mientras que la pesca, una actividad económica fundamental para la comunidad, ha sido gravemente perjudicada.
Román Bustos, capitán de puerto, ha anunciado sobre las consecuencias de esta situación. Señala que se necesitan aproximadamente dos metros de profundidad para movilizar las embarcaciones de capitanía de puerto, y en la actualidad, los bajos niveles del lago no lo permiten. La gravedad de la situación ha llevado a representantes de comunidades cercanas y de la Sociedad Cooperativa de las islas de Janitzio, Tecuén, Yunuén y Pacanda a emitir un manifiesto dirigido a los tres niveles de gobierno.
Saqueo de agua; se abastecen hasta 12 pipas diarias
En el manifiesto, se recrimina la falta de atención por parte de las autoridades a pesar de las repetidas advertencias sobre la situación crítica del lago. Benito Mendieta Barriga, presidente del Consejo de Administración y Vigilancia del Muelle General, ha destacado la necesidad de coordinar los planes de desarrollo a nivel local, estatal y federal para abordar el problema. También ha enfatizado la importancia de implementar programas de reforestación masiva con especies endémicas, instalar plantas de tratamiento de agua más eficientes y detener el saqueo de agua, que según denuncias, involucra la extracción de hasta 120 pipas diarias de agua para huertas de aguacate en Uruapan.
José Luis Camilo, jefe de tenencia de la comunidad indígena afectada, responsabiliza directamente a los productores de aguacate por el saqueo ilegal de agua que ha contribuido al desastre. A pesar de los esfuerzos de la comunidad para mantener los manantiales y aumentar los niveles de agua, la situación no ha mejorado. La sequía también ha obligado a la Sociedad Cooperativa de Promoción y Servicios Turísticos del lago de Pátzcuaro a desazolvar el canal de navegación principal, lo que ha impactado negativamente en el turismo y el comercio.
Autoridades minimizan el problema
A pesar de la gravedad de la situación, Octavio Muñoz Torres, subdirector técnico de la dirección en Michoacán de la Conagua, ha minimizado la gravedad de la crisis, argumentando que la disminución del nivel del agua se debe a la falta de precipitaciones. Sin embargo, los habitantes locales y los expertos sostienen que la explotación irracional del agua y la tala de bosques también son factores determinantes en esta emergencia.
En enero de 2022, se presentó un proyecto para el mantenimiento del canal de navegación en el lago, pero este no se concretó por falta de recursos. Los afectados esperan que las autoridades municipales atiendan sus peticiones y tomen medidas concretas para enfrentar la crisis del lago. En caso de no recibir respuesta, han anunciado que tomarán otras acciones para preservar este invaluable recurso natural y cultural que forma parte integral de la identidad de la región.
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Con información de El Heraldo de México y Am.
