Aunque es muy común ver campañas de recolección de plástico, PET e incluso cartón, otra ruta poco explorada, pero muy fructífera es el reciclaje del papel. Un residuo que se da al por mayor en casas, escuelas y oficinas, pero que muchas veces pasa desapercibido.
Mujeres Unidas con Salud, Amor y Seguridad, mejor conocidas como MUSAS, es una de las organizaciones que, entre sus actividades, se dedica al reciclaje del papel. De esta manera, involucran actividades con un beneficio ambiental y destinan los frutos del reciclaje a causas sociales y de salud.
¿Por qué es importante el reciclaje del papel?
De acuerdo con Mónica Trujillo, fundadora de Comunidad MUSAS, en contraste con el PET o el Tetra Pak, el papel es un material que se puede reunir y transportar fácilmente, lo que facilita su reciclaje y almacenamiento.
Según cifras del Inegi, este tipo de residuo, junto con el cartón, constituye el 17% del total de los desechos en México. Además, más del 70% de este porcentaje puede ser recuperado y reintegrado a la cadena de valor.
“El papel es un material que todos piensan que se degrada o que se deshace así nada más, pero si a ese papel no le das una correcta gestión, jamás se va a deshacer”, comenta Mónica Trujillo.
Una de las ventajas del papel como material reciclable es que la mayoría de los productos fabricados con él pueden ser reciclados, como periódicos, revistas, cajas, cartones, folletos publicitarios, papel de escritura o copia, libros y cuadernos.
¿Cómo se recicla el papel?
Para que el papel pueda ser reciclado debe pasar por un proceso adecuado. Primero, el papel para reciclaje se lleva a centros especializados donde se clasifica según su fecha de llegada, descripción y tipo. Sin embargo, no todo el papel puede reciclarse, como el papel higiénico, para envolver comida, fotográfico o con parafina, debido a que contienen residuos difíciles de separar.
Después de la clasificación, se realiza el proceso de pulpado para separar las fibras y formar una pasta.
Luego, se eliminan los posibles residuos con tamices y se elimina la tinta con jabón y aire a presión.
A continuación, se realizan lavados para reducir el agua y finalmente se seca para obtener láminas de papel nuevo.
¿Cuáles son los beneficios de reciclar el papel?
Reciclar este tipo de residuo tiene importantes beneficios ambientales, como la reducción de la deforestación, ya que se estima que por cada tonelada de papel reciclado se evita la tala de 13 árboles, según datos de Ecología Verde.
Además, al reducir la deforestación, se evita la emisión de 900 kilogramos de CO2. También se ahorrarán grandes cantidades de agua, energía y petróleo que se necesitarían para la producción de papel nuevo.
Al respecto, Trujillo comentó que “con el ciclo de reciclaje del papel, estamos creando un ciclo de vida en el que no solo no le quitamos a la naturaleza, sino que también le devolvemos algo”.
¿Cómo empiezo a reciclar papel?
La organización MUSAS ha creado una comunidad en la Ciudad de México que facilita el reciclaje de residuos. Han establecido puntos de acopio en cuatro lugares estratégicos de la ciudad, los cuales son:
- El Parque Naucalli
- Viveros de Coyoacán
- Parque de los Venados
- El parque detrás de la delegación Venustiano Carranza
“Para lograr recaudar más material creamos una red de acopio en cuatro puntos de la Ciudad de México a la que acudimos una vez al mes:”, señaló Mónica.
Además de estos puntos de reciclaje, MUSAS también lleva a cabo campañas de recolección en ciertas épocas del año. Una parte importante de estas campañas es colaborar con escuelas, recolectando libros y cuadernos, a cambio de ofrecer charlas y actividades relacionadas con la conciencia social y ambiental a los estudiantes, maestros y padres de familia. De esta manera, MUSAS busca involucrar a las personas en el proceso de gestión adecuada de residuos y promover una mayor conciencia ambiental en la comunidad.
“Entre junio y septiembre hacemos una campaña llamada Cuadernazo, en la que recaudamos libros y cuadernos que por el cambio de ciclo escolar se podrían ir a la basura”, añadió.
El reciclaje y las buenas causas
La comunidad MUSAS surgió en febrero de 2019 después de que su fundadora padeciera cáncer de mama.
Su objetivo principal era brindar apoyo a las mujeres para que pudieran enfrentar su enfermedad de manera digna y superarla.
Durante este proceso, se dio cuenta de que el cáncer no solo afecta a nivel médico, sino que también tiene un impacto en aspectos como la familia, el trabajo y la salud emocional y mental.
“Me di cuenta de que venían mujeres de otros estados de la República que a veces no comían o no dormían, lo que hacía imposible que se curaran”, cuenta.
“Después de recaudar el material lo vendemos a quienes se dedican a su reciclaje y con el dinero obtenido pagamos los recibos de servicios, algunas sesiones de ayuda psicológica e incluso una vez logramos pagar una quimioterapia con la venta del papel del archivo muerto”, cuenta Mónica Trujillo.
En la actualidad, MUSAS ha evolucionado más allá de ser solo un albergue para mujeres con cáncer que viajan desde otras partes de México. También otorga atención psicológica y seguimiento, así como talleres y clases dentro de la comunidad.
“También queremos que este lugar sirva como una inspiración para mujeres que están iniciando su proceso con el cáncer, porque si ves a más personas que ya pasaron el proceso que tú estás iniciando puedes pensar: Si ellas lo lograron, yo también puedo”, comenta.
MUSAS se esfuerza por crear una comunidad social y ambientalmente responsable, conectando el reciclaje de residuos, como el papel, con la ayuda que pueden brindar a otras personas.
“Es una cadenita de ayuda en la que incluso las personas ajenas al cáncer se pueden involucrar, porque saben que están ayudando al medioambiente, pero además están contribuyendo a la construcción de una comunidad de apoyo a mujeres con cáncer”.
Entre las actividades que realizan están clases de yoga, realización de pelucas, separación de residuos y un bazar.
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Con información de El Sol de México.
