El alza en reportes de incidentes en el espacio aéreo se ha vuelto en factor de riesgo que deja atrás el asunto de la saturación de vuelos.
Récord de vuelos en 2018
La construcción de un nuevo aeropuerto internacional para la Ciudad de México respondía a la necesidad de atender la demanda de transporte aéreo con mejores servicios, así como impulsar el crecimiento económico y desarrollo en toda la zona oriente de la Ciudad.
De acuerdo con datos del IMCO, ya en 2014 el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) “Benito Juárez” obtuvo una declaratoria de saturación por rebasar el límite de 61 vuelos por hora en mil 801 ocasiones. La capacidad de operación desde su construcción estaba prevista en 35 millones de pasajeros.
Para 2017 superó los 44 millones de viajeros y 449 mil vuelos. Un año después, en 2018, alcanzó la histórica cifra de 47 millones 674 mil 115 pasajeros, lo que significó un incremento de 6.6% con respecto al año previo y 36.2% por encima de su capacidad total.
Estos récords obligaron, en su momento, a modificar el Plan Maestro del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) para satisfacer la demanda aérea esperada al 2021 y, en consecuencia, se reestructuró el costo de la inversión al pasar de 169 mil millones de pesos a 285 mil millones de pesos, un incremento del 70%.
A pesar de las críticas al alza del costo (argumento que utilizó AMLO para imponer su proyecto con sede en Santa Lucía) se había establecido que el 10% sería inversión pública y el 90% correría a cargo de inversión privada.
Capacidad logística ante la saturación
Incluso con el problema de saturación en 2018, el AICM pudo operar nuevos vuelos como el que abrió la empresa Hainan Airlines entre Beijing y la Ciudad de México, con escala en Tijuana; o bien, American Airlines hacia Filadelfia. Así mismo, el que inició VivaAerobus hacia Nueva York y los de JetBlue con destino a Boston y Nueva York.
Luego de la cancelación de la obra con la llegada de Andrés Manuel al poder, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional advirtió que, al descartarse el proyecto en Texcoco, los aeropuertos del país verían limitado a 116 millones el total de pasajeros por año para 2034, una diferencia de más de 20 millones de pasajeros anuales.
Situación que también afecta directamente la derrama económica para México.
Incidentes aéreos
Es claro que, a dos meses de su inauguración, el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” no ha sido la solución que prometió el gobierno federal después de insistir que ofrecería muchas más ventajas de las que ya se habían planteado con la construcción del NAIM en Texcoco.
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El aumento de incidentes en el espacio aéreo representa ya un factor de riesgo grave, así lo advirtieron especialistas en aeronáutica, quienes también alertaron que de continuar podría acabar en una tragedia de dimensiones incalculables.
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Hasta ahora, hay un acuerdo en que el rediseño respondió a una decisión política, y no técnica, para justificar y garantizar la operatividad del AIFA, uno de los magnos proyectos de AMLO.
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Al respecto, María Larriva Sahd, especialista en aeronáutica, señaló que los incidentes en el AICM se tratan propiamente del desorden generado por el rediseño del espacio aéreo. Desde su perspectiva, existen focos rojos en el nuevo diseño, así como en las disposiciones de administración del aeropuerto.
El resultado, sostiene, ha sido un trazo “ineficiente, inseguro, malo y costoso”.
Con información de IMCO, El Economista, Dinero en Imagen.
