Casa Rivas Mercado: horarios, costos, ubicación

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La Ciudad de México está llena de tesoros arquitectónicos que cuentan historias únicas, y uno de los más destacados es la Casa Rivas Mercado. Ubicada en la colonia Guerrero, esta joya arquitectónica construida por el reconocido arquitecto Antonio Rivas Mercado, creador del icónico Ángel de la Independencia y otros destacados edificios del Porfiriato, se presenta como una visita imperdible para los amantes de la historia y la arquitectura.

La casa, cuyo estilo ecléctico se empezó a edificar en 1893, es un testimonio tangible del esplendor y la diversidad arquitectónica de la época. La utilización de 7 tipos de cantera, tres pisos distintos, columnas dóricas y escaleras árabes son solo algunos de los elementos que componen este magnífico edificio que solía ser un punto de encuentro para artistas, pintores, escritores y figuras prominentes como Diego Rivera y José Vasconcelos.

Casa Rivas Mercado quedó en abandono tras el terremoto de 1985

Construida sobre un predio de dos mil metros cuadrados, la Casa destaca no solo por su diseño, sino también por su ubicación poco convencional, ya que no se encuentra directamente sobre la calle, como era común en esa época. Sin embargo, tras el terremoto de 1985, la Casa cayó en abandono hasta que en mayo de 2017 reabrió sus puertas después de una extensa restauración.

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Datos Curiosos de la Casa Rivas Mercado

La Casa Rivas Mercado presenta un estilo arquitectónico singular y característico. Su enfoque ecléctico se destaca por su búsqueda de identidad en un contexto que aspiraba a liberarse de las normas estéticas clásicas y neoclásicas. Esta residencia, que mira hacia el futuro pero mantiene vínculos con el pasado, combina materiales, configuraciones espaciales y formalidades propias de la arquitectura clásica postcolonial. Al mismo tiempo, se desmarca de las convenciones estéticas al incorporar estratégicamente elementos como el acero y detalles moriscos, que aportan una perspectiva única proveniente del diseño español.

La fachada, elaborada en cantera rosada y piedra en el basamento, se enriquece con mosaicos moriscos en el friso de la entrada, aportando el toque adecuado de color a una fachada de estilo tradicional. El uso del acero se hace evidente en la residencia a través de barandales estilo art nouveau que enmarcan una escalinata doble. Esta escalinata conduce a un vestíbulo con columnas dóricas, estableciendo una elegante transición entre los espacios públicos y privados. Uno de los elementos distintivos del eclecticismo de la vivienda son los apliques metálicos en tono esmeralda que se entrelazan con la balaustrada de las terrazas en el segundo nivel, fusionando una construcción que evoca el renacimiento con elementos de fachadismo que buscan inspiración en el modernismo.

En el interior de la casa, donde se dice que Antonio impartía clases a los niños de la comunidad, destaca la presencia de madera de encino. Esta madera se encuentra tanto en la escalera como en las vigas expuestas de los entrepisos, así como en las ornamentaciones victorianas de las numerosas puertas y ventanas. Además, los pisos reflejan la influencia española del arquitecto Rivas Mercado, con 90 patrones distintos creados a partir de mosaicos encáusticos, lo cual agrega una capa adicional de carácter y sofisticación a la vivienda.

Visitas guiadas a la Casa Rivas mercado

Hoy en día, los visitantes tienen la oportunidad de explorar esta impresionante residencia a través de recorridos guiados. Estas visitas se llevan a cabo los fines de semana a partir de las 13:30 horas y ofrecen una experiencia enriquecedora que dura aproximadamente una hora y media. Durante el recorrido, los asistentes pueden explorar los dormitorios de Antonio Rivas Mercado y su esposa, el cuarto de bebés, la biblioteca llena de antigüedades, dos comedores y el taller del arquitecto.

Los detalles árabes y los impresionantes pisos de la casa son especialmente destacados durante la visita, brindando una visión única de los gustos y la visión artística de Rivas Mercado.

Para los interesados en descubrir este tesoro arquitectónico, la Casa Rivas Mercado se encuentra en la dirección Héroes 45, Guerrero. Se requiere hacer una reservación previa llamando al número: 2591 6666.

El costo de la visita es de 200 pesos por persona, aunque los residentes de la colonia Guerrero tienen un precio preferencial de 30 pesos.

Sumérgete en la historia y la belleza de la Casa Rivas Mercado, un lugar que te transportará a una época pasada y te permitirá apreciar la riqueza arquitectónica y cultural de la Ciudad de México.

Colonias de la CDMX en las que habitó la clase alta en el pasado

La Ciudad de México alberga en su historia diversos enclaves que atestiguan la presencia y el esplendor de la clase alta en épocas pasadas. Entre estos distinguidos barrios, destaca la colonia Guerrero, cuyos elegantes rincones guardan reminiscencias de un periodo de opulencia y desarrollo. Uno de los ejemplos más notables de esta época es la Casa Rivas Mercado. Durante el auge inmobiliario de la clase media y alta en el Porfiriato, esta zona era conocida como Bellavista, un testimonio tangible de la riqueza arquitectónica y social que prevalecía en la época.

La colonia Guerrero, sin embargo, no fue la única que albergó el prestigio y el poder de la élite. La colonia Juárez, en algún momento se convirtió en un verdadero “pedacito de Viena o Bruselas” en suelo americano, personificando la elegancia y sofisticación de la clase alta de antaño. De igual manera, la colonia Roma, concebida para la clase media, floreció como un rincón arbolado y embellecido con bancas de hierro en sus aceras, que brindaban lugares de recreo y esparcimiento.

La colonia Santa María La Ribera, en el ocaso del siglo XIX y el albor del XX, vivió un florecimiento inmobiliario que dejó huellas imborrables en su paisaje. Para conmemorar el centenario de la independencia en 1910, la zona dio la bienvenida a modernas edificaciones como el Museo del Chopo y el Kiosco Morisco, símbolos de una época de prosperidad y avance.

Por su parte, la colonia San Rafael también se destacó como un refugio para las mansiones de la élite y un lugar donde los intelectuales encontraron hogar. Estos lugares de esplendor y grandiosidad, testigos de un pasado lleno de vitalidad y prosperidad, siguen siendo un recordatorio vivo del rico tejido histórico de la Ciudad de México.

Con información de México desconocido, AD Magzine y Radio Fórmula.

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