Colectivas y figuras políticas manifestaron su descontento ante las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador del pasado miércoles en torno a la violencia política de género, quien sugirió que los cuestionamientos dirigidos hacia él podrían ser interpretados como formas de este tipo de violencia.
El pronunciamiento del presidente se produjo en respuesta a las medidas adoptadas por las autoridades electorales que concluyeron que López Obrador ejerció violencia política de género en contra de Xóchitl Gálvez, una aspirante de la oposición. Estas medidas generaron reacciones en diversos sectores de la sociedad.
“Y también una pregunta, todo lo que me dicen a mí ¿No hay violación de género? ¿O el género es nada más femenino?”, declaró el mandatario en su conferencia matutina.
La colectiva Brujas del Mar, conocida por su activismo en favor de los derechos de las mujeres, expresó un fuerte rechazo ante la percepción de López Obrador sobre los cuestionamientos hacia su figura. Calificaron su postura como “patética” y señalaron la contradicción de considerar como violencia los cuestionamientos provenientes de su posición de poder.
“(…) Lo patético que es que traduzca como “violencia” a quien lo increpe, critique o cuestione siendo una figura de poder, y de lo ignorante y misógina de esta lamentable declaración”, publicó en sus redes sociales.
Por su parte, Carolina Viggiano, secretaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI), hizo hincapié en que el presidente parece no tener claridad en cuanto al concepto de violencia política de género. Viggiano instó a López Obrador a convertirse en un aliado de la lucha por los derechos de las mujeres y a cesar en sus ataques hacia ellas.
“No, señor presidente, usted no sufre violencia por el hecho de ser hombre, pero sí violenta a las mujeres, su lucha, su capacidad y las estereotipa por el hecho de ser mujeres y participar en política”, se lee.
Las declaraciones del presidente generaron un amplio debate en torno al significado y la percepción de la violencia política de género, así como a la responsabilidad de las figuras de poder en la protección de los derechos de las mujeres en el ámbito político. La discusión resalta la importancia de una comprensión precisa y respetuosa de este tema en el contexto del debate público.
¿Qué es la violencia política de género?
La violencia política de género se refiere a cualquier acción, comportamiento, discurso o práctica que tenga como objetivo o resultado afectar negativamente a una persona o grupo debido a su género, con el propósito de limitar, menoscabar o impedir su participación y desarrollo en la esfera política. Esta forma de violencia está basada en la discriminación de género y busca mantener o reforzar estructuras de poder desigual.
Es por eso que, aunque en teoría los hombres también podrían sufrirla, el permanecer en un sistema en el que las estructuras otorgan poder a los hombres y desigualdad a las mujeres, hace que sean las mujeres las principales víctimas por este tipo de violencia.
La violencia política de género puede manifestarse en diversas formas, como acoso sexual, intimidación, discriminación, difamación, agresiones verbales o físicas, amenazas, entre otros comportamientos, dirigidas hacia mujeres en el ámbito político o hacia personas que no se ajustan a las normas tradicionales de género. Estas acciones pueden tener lugar tanto en espacios públicos como en medios de comunicación, redes sociales y en la esfera privada.
La violencia política de género busca socavar la participación y la representación de las mujeres en la política, así como perpetuar la desigualdad de género en dicha esfera. Reconocer y abordar esta forma de violencia es fundamental para promover una participación política inclusiva y equitativa, así como para avanzar hacia sociedades más justas y respetuosas de los derechos humanos.
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Con información de Formato 7 y El Universal.
