Ante los altos índices de violencia de género en el país y el aumento de los feminicidios, las mujeres mexicanas tienen cada vez más miedo de salir a las calles.
“Se está violando es el derecho a vivir una vida libre de violencia”
La violencia contra las mujeres y los feminicidios en México son una lamentable realidad hoy en día y actualmente han generado un sentimiento de estrés y ansiedad entre las mujeres de todas las edades, quienes se sienten inseguras cada vez que salen al trabajo, la escuela o a cualquier lugar, y su temor aumenta cada vez más debido a la gran cantidad de noticias sobre violencia de género que se pueden ver todos los días en periódicos, televisión y redes sociales.
De acuerdo con el Programa General de Ordenamiento Territorial (PGOT CDMX), “la inseguridad en la Ciudad de México ha generado que las mujeres, en comparación con los hombres, dejen de realizar ciertas actividades cotidianas”. En este sentido indica que 46 de cada 100 mujeres que viven en la capital del país han decidido dejar de salir por la noche y “48.5% de ellas tienden a sentirse más inseguras que el 41.3% de los hombres; 69% de las mujeres se siente más insegura en centros comerciales y lugares de recreación que el 64% de los hombres”.
En este contexto, Ana Celia Chapa, profesora investigadora de la facultad de psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explica que el Estado debe garantizar la seguridad de las mujeres en lugar de emitir recomendaciones para que “no se expongan” y salgan acompañadas o vistan de cierta manera. Además, considera importante poder reconocer cuando la violencia que se vive no solo está en las calles, sino en el entorno familiar, laboral o en sus relaciones de pareja.
“Hay una relación directa entre la violencia que se vive hacia nosotras y la situación de alteraciones, en la sensación de seguridad, finalmente lo que se está violando es el derecho a vivir una vida libre de violencia”, explicó la especialista.
Hay que pasar del pánico social a las acciones colectivas
Ana Celia Chapa explica que el temor que sienten las mujeres es legítimo y señala que “la violencia nunca es de nivel bajo, siempre es medio y alto”. Asimismo, señala que, ante la gran cantidad de información que existe sobre los delitos contra mujeres y la violencia de género, es preciso comenzar a detectar las señales de violencia que cada mujer pudiera estar viviendo en su entorno personal o laboral para evitar que esta escale a niveles más graves.
La especialista explica que, al identificarla será posible pasar del “pánico social, a las acciones colectivas concretas, al exigir al Estado garantías, poder discutir de qué manera podemos identificar las violencias, de qué manera puedo apoyar a quién están violentando y lo estoy permitiendo, de qué manera puedo pedir ayuda”. Asimismo, exhortó a los medios de comunicación a que aborden la temática desde una perspectiva mucho más humana que permita a las mujeres tomar conciencia sobre la violencia contra las mujeres, sus características y su origen.
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Con información de La Prensa
