De un INE ciudadano a un INE del Bienestar

La reforma electoral que plantea el Ejecutivo tiene como objetivo conquistar otro flanco del poder público.

Los motivos detrás de la reforma electoral de AMLO

En su columna, Tonatiuh Medina, abogado y representante del PRI en el Instituto Electoral de Estado de México (IEEM), cuestiona las verdaderas intenciones del presidente Andrés Manuel López Obrador con la iniciativa que planea enviar de reforma electoral.

¿Será porque busca una reelección? En primer lugar, las aspiraciones de continuar su mandato más allá del periodo constitucional no deberían desecharse por una cuestión de edad o causa del propio discurso del presidente. Aunque, apunta, la atención deberá dirigirse en algo más práctico, la ambición que tiene Morena de hacerse del poder público que concentra el Instituto Nacional Electoral.

La reforma, admite Medina, “es la única vía legítima y pacífica para conquistar el poder público, y un día sí y otro también buscan dinamitarlo”.

El primer intento para debilitar al INE ha sido la descalificación mediante el aparato propagandístico con el que tanto el gobierno como el partido oficial, Morena, cuentan; el segundo, ahorcarlo financieramente como pasó con el presupuesto asignado para la consulta de revocación de mandato; tercero, el continuo ataque contra los consejeros que van desde acusaciones hasta amenazas de juicio político.

¿Por dónde atacará la reforma?

Una de las propuestas de reforma de AMLO dadas a conocer por el propio presidente, es que la elección de consejeros del INE y magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) se haga mediante voto directo por la ciudadanía.

Lee: Reforma electoral de AMLO desmantelará toda la estructura del INE

“¿En serio? ¿Después de los números que obtuvieron en el ejercicio de revocación de mandato, eso es lo que quieren? ¿Acaso creen que están solos en el mundo y que todos votarían por sus propuestas conociéndolos?”

Tonatiuh Medina

Además de proponer mecanismos como el voto electrónico o que la ciudadanía tenga en sus manos la capacidad logística de instalar casillas e imprimir boletas, facultades únicas e intransferibles a los órganos electorales. El peligro de estas ocurrencias, es que personajes como Epigmenio Ibarra, Patricia Armendáriz o Manuel Bartlett tengan en sus manos la responsabilidad de encabezar comicios.

Es por ello, concluye Tonatiuh, que la reforma planeada desde la 4T es una burla y, en consecuencia, no es propia de un sistema democrático.

“¿Esa es la tontería de reforma que quieren? Sorprende que algunos poderosos oficialistas salgan con la ya gastada brocha de que “si el gobierno organiza la elección, habrá menos errores”. No pueden surtir de aspirinas al IMSS, el chiste se cuenta solo”.

Tonatiuh Medina

También consulta: Lorenzo Córdoba llama a una reforma electoral sin revanchas

Con información de Siempre MX.

Recommended Posts