El presidente Andrés Manuel López Obrador se mostró victorioso luego de que los datos más actualizados del Coneval revelaran que 5.1 millones de personas salieron de la pobreza en México en los cuatro años de su gobierno. Sin embargo, el político mexicano Demetrio Sodi consideró que no es un hecho demasiado aplaudible. Esto se debe a que, si el país continúa reduciendo la pobreza a ese ritmo, tardaríamos casi 40 años en eliminarla.
Sodi también señaló un incremento en la pobreza extrema, contradiciendo las afirmaciones del gobierno.
“En el caso de la pobreza extrema, no sólo no disminuyó, sino que hubo un aumento, sus programas sociales no le llegaron a la gente más pobre”, consideró.
Además mencionó que los programas sociales implementados por el presidente no lograron llegar a las personas más vulnerables de la sociedad.
Un retroceso en servicios públicos
El político reconoció que ha habido mejoras en cuanto al aumento de los ingresos personales, atribuidas al aumento del salario mínimo, los programas sociales y las remesas. No obstante, cuestionó la falta de progreso en áreas fundamentales como salud, educación, vivienda y acceso a servicios públicos básicos.
“Los resultados de estos cuatro años de gobierno son positivos en lo referente al aumento de los ingresos personales, debido al aumento al salario mínimo, el impacto de los programas sociales y la remesas, pero no hubo avance, e inclusive hubo retroceso, en salud, educación, vivienda y acceso a servicios públicos básicos”, aseveró.
Quien nace pobre, muere pobre
Uno de los puntos centrales de la crítica de Sodi es la marcada desigualdad de oportunidades, especialmente entre los jóvenes de ingresos altos y medios, en contraste con aquellos que viven en la pobreza. “
“La movilidad social en nuestro país se ha acabado, quien nace pobre muere pobre y tiene escasas posibilidades de salir de la pobreza”, precisó Sodi.
Sodi sugirió como solución a la desigualdad y la pobreza la garantía de trabajos bien remunerados y el acceso equitativo a derechos sociales para toda la población. Consideró esencial elevar el salario mínimo hasta que sea suficiente para cubrir las necesidades básicas de una familia y aboga por una estrategia que incentive la transición del empleo informal a la formalidad.
“La única forma de sacar a la gente de la pobreza y lograr mayor igualdad es con un trabajo bien remunerado y garantizando los derechos sociales a toda la población, por lo que, mientras no logramos que el salario mínimo sea suficiente para salir de la pobreza e igualemos el acceso a salud, educación, vivienda digna y servicios públicos, no hay posibilidad de reducir la desigualdad y eliminar la pobreza”, sentenció.
Además, el político se dijo a favor de por una reforma fiscal que aumente al menos un 50% de los ingresos públicos.
“El Estado mexicano no cuenta con los recursos suficientes para garantizar a toda la población las mismas oportunidades y mientras no contemos con más recursos, será imposible avanzar en la solución del problema de la desigualdad social. López Obrador pudo posponer la reforma fiscal, porque se gastó todas las reservas y fondos que se tenían y está dejando una herencia de compromisos de gasto público que obliga a una reforma!, dijo Demetrio.
México, con una gran economía y mucha pobreza
Sodi concluyó sosteniendo que, aunque las estadísticas recientes indican una disminución en el número de pobres, esta reducción es insuficiente dada la magnitud del problema.
“No debemos aceptar que un país que es la decimocuarta economía del mundo y vecino del país más rico del mundo, tenga 46.8 millones de pobres y 9.1 millones de personas que viven en extrema pobreza”, señaló.
Finalmente, Sodi planteó la necesidad de un compromiso genuino para eliminar la pobreza y reducir las desigualdades, destacando que hablar de unidad sin abordar estos problemas es un discurso vacío en la búsqueda de soluciones reales.
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Con información de El Economista.
