El diputado federal, Porfirio Muñoz Ledo y la senadora Ifigenia Martínez, ambos pertenecientes a las bancadas de Morena en las Cámaras, hicieron un llamado para un “diálogo incluyente” por la República, a fin de evitar la centralización del poder y fomentar el respeto a las instituciones.
A través de una misiva pública en las redes sociales de Muñoz Ledo, los legisladores aseguraron que su “Movimiento por la República”, no pretende convertirse en partido político, en cambio, “aspira a reflejar el estado de la conciencia ciudadana que exige un cambio democrático profundo por vía pacífica e institucional”.
Argumentando que en la segunda mitad del sexenio del actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, debiera consumarse el movimiento libertario que iniciaron en 1988, presentaron un decálogo en el que, en resumen, se expone:
- Respeto al principio y práctica de la división de Poderes. El fin de la supeditación de las Cámaras de Congreso a las disposiciones del Ejecutivo.
- Respeto al sistema federal y municipal que define a la República desde 1824. Alto a las tendencias centralistas encarnadas en los súperdelegados.
- Respeto escrupuloso a la independencia del Poder Judicial.
- Respeto a los órganos constitucionales autónomos como fruto de las luchas históricas por la democracia así como a su papel irrenunciable de limitar el poder absoluto.
- Respeto a la sociedad civil y a sus organizaciones. Libertad de las personas para inventar, crear disentir y autodeterminarse.
- Respeto a los compromisos de los derechos inalienables de los pueblos originarios y las comunidades indígenas, a sus culturas, lenguas, tierras, territorios y recursos.
- Respeto a la pluralidad esencial del país, a la libertad de opinión, crítica, creación, innovación y disenso.
- Respeto a la opinión informada sobre la situación económica y social del país.
- Respeto a los esfuerzos nacionales por mantener independientes y ejercer facultades soberanas en un mundo globalizado.
- Respeto a la voluntad soberana de los ciudadanos mexicanos para determinar su forma de gobierno e instituciones públicas.
“Polarizar es paralizar, concertar es progresar. Esperamos su opinión y sus propuestas”, concluye el documento de los legisladores.
