El informe final de la empresa noruega DNV sobre el accidente en la Línea 12 señala fallas atribuibles a las administraciones de Ebrard, Mancera y Sheinbaum, lo que molestó a la jefa de Gobierno, quien decidió demandar a la consultora.
Inconforme con los resultados
El gobierno de la Ciudad de México, encabezado por Claudia Sheinbaum, demandó por la vía civil a la empresa noruega DNV, con la que cortó lazos tras la entrega de su último informe sobre la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo Metro. La mandataria amagó también con demandar a la consultora penalmente, pues no está de acuerdo con los resultados que presentaron en el documento titulado “Causa-Raíz”, informe final de los resultados de sus peritajes sobre el desplome de un tren de la Línea 12 del Metro, que derivó en la muerte de 26 personas y dejó a más de 100 heridas.
Aunque aún no son públicos los resultados del informe, fuentes cercanas al gobierno capitalino han revelado a los medios de comunicación que el documento desvela fallas estructurales y de construcción en el gobierno de Marcelo Ebrard, además de señalar omisiones e irregularidades por parte de las administraciones de Miguel Mancera y Claudia Sheinbaum, mismos que contribuyeron a que sucediera la tragedia. En pocas palabras, atribuye responsabilidad a todas las administraciones de la CDMX, desde la construcción de la Línea Dorada, hasta el momento del colapso.
Lee también: Después de meses y millones invertidos, la Línea 12 sigue cerrada
El coraje de Sheinbaum
La jefa de Gobierno de CDMX no está contenta con la información presentada por DNV en su último informe. Para justificar su molestia, ha llegado a ligar a la empresa noruega con el némesis del presidente Andrés Manuel López Obrador, el empresario Claudio X. González y con la organización civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
“Es un informe deficiente, mal ejecutado, con problemas técnicos, tendencioso y falso”, dijo Sheinbaum en su conferencia de prensa de este miércoles.
Sin embargo, hace menos de un año, Sheinbaum tenía una opinión muy diferente sobre la consultora y aseguraba que era una de las mejores empresas del mundo para llevar a cabo los peritajes de la obra:
“DNV es el experto independiente en gestión de riesgos y garantía de calidad, que opera en más de 100 países y fue fundada en Noruega en 1864; es una empresa líder en el mundo y es especialista en análisis y la investigación de falla, y en certificación y servicios de prueba”, decía la mandataria en junio de 2021.
La jefa de Gobierno señaló en aquel entonces que todos los resultados de los peritajes serían dados a conocer de forma transparente, lo que no ha ocurrido hasta el momento con el informe final de DNV: aunque Sheinbaum ha aceptado públicamente tener en su poder el último documento entregado por la consultora, declaró que no los ha dado a conocer porque rechaza los resultados.
“Hacen un análisis que no corresponde con lo que originalmente se planteó. Es importante porque nosotros no vamos a aceptar que se tergiverse la realidad. ¿Cómo ahora resulta que la empresa, por más nombre que tenga, permitió que se hiciera un uso de esto?, ¿por qué escogen a este abogado?, y ¿por qué cambian completamente la visión del segundo al tercer reporte?”, cuestionó Sheinbaum.
