Este lunes se restablecen los cruces en la frontera norte con Estados Unidos para actividades no esenciales.
Después de 597 días de cierre a causa de la pandemia por COVID-19, Estados Unidos abre su frontera con México para actividades no esenciales. El principal requisito para quienes aspiren a cruzar, ya sea por turismo o comercio, es, en primer lugar, presentar el esquema completo de vacunación con inmunizaciones aprobadas por la Organización Mundial de la Salud:
Sputnik y CanSino quedan excluidas, por lo tanto a quienes intenten pasar y fueron vacunados por este biológico, no les será permitido el acceso por las autoridades fronterizas.
Más de treinta países estarán incluidos en en levantamiento de la “prohibición”.
A partir del lunes, se deberá presentar el certificado de vacunación y una prueba negativa dentro de los tres días previos a la salida, además las aerolíneas tendrán que implementar un sistema de seguimiento de contactos.
En el caso de los menores de edad, entre 2 y 17 años, no se les exigirá la vacunación pero sí deberán cumplir con la condición de presentar un test negativo de COVID, realizado tres días antes del viaje y los menores de 2 años, por su parte, están exentos tanto de vacuna como de test.
En tanto por ruta terrestre, las personas que lleguen por motivos familiares o turísticos, podrán cruzar la frontera de Canadá o México siempre que estén vacunadas y presenten prueba negativa. Los conductores de camiones estarán exentas de ese requisito al tratarse de una necesidad imperiosa, sin embargo, en enero la obligación de la vacunación se aplicará a todos los visitantes que crucen las fronteras terrestres, independientemente del motivo de su viaje.
Mientras tanto, las y los ciudadanos estadounidenses no están obligados a estar vacunados, pero sí deberán presentar un test negativo con un día de antelación del viaje a Estados Unidos y realizar uno de nuevo de regreso al país.
Las nuevas reglas se aplican únicamente a los ingresos legales, ya que los funcionarios estadounidenses enfatizaron que los migrantes irregulares seguirán siendo sujetos a expulsión.
Entre las ciudades que más resintieron el impacto económico de las restricciones de movilidad se encuentran Texas y California, las pérdidas se han estimado en 71,000 millones de dólares durante los 20 meses de cierre por la pandemia.
Con la reapertura, los grandes ganadores serán los comerciantes estadounidenses, los comercios mexicanos tiene el reto de sostener los 60 mil millones de pesos en ventas que se han registrado en toda la frontera de quienes no podían hacer compras en territorio estadounidense. Las previsiones en este sentido son negativas pero habrá que esperar el comportamiento de los consumidores.
Con información de Animal Político.
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