La Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) unidad Zacatenco del Instituto Politécnico Nacional (IPN) ha lanzado la segunda edición de su campaña de recolección de medicamentos caducados.
¿Por qué es importante reciclar los medicamentos?
De acuerdo con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), aproximadamente 12 millones de medicamentos caducos quedan sin recuperar en México. Según la dependencia, el 30% de estos medicamentos no recuperados terminan en el mercado ilegal, contribuyendo a la venta no autorizada de productos farmacéuticos.
Además, una cantidad considerable de estos fármacos caducos termina en vertederos de basura, generando contaminación ambiental y afectando los cuerpos de agua.
¿Cómo y cuándo llevar los medicamentos caducos al centro de recolección?
La campaña, que se lleva a cabo del 9 al 19 de enero en los planteles Zacatenco y Santo Tomás del IPN, es organizada por el Laboratorio de Toxicología Acuática de la ENBC, en colaboración con el Sistema Nacional de Gestión de Residuos de Envases y Medicamentos (Singrem).
Los contenedores especiales ubicados en estas instalaciones permitirán a la comunidad depositar medicamentos en desuso, cajas de medicamentos, envases vacíos o con restos, así como medicamentos de uso veterinario.
¿Qué medicamentos no pueden ser depositados en contenedores?
De acuerdo con la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas, existen algunos elementos que no pueden ser depositados en los contenedores de medicamentos caducos, tales como:
- Agujas
- Gasas
- Pilas
- Productos químicos
- Termómetros
- Jeringas
- Equipo para venoclisis
- Pañales
La Dra. Sandra García Medina, investigadora y responsable del Laboratorio de Biofarmacia, enfatiza la importancia de desechar los medicamentos de manera correcta para evitar la contaminación de los ecosistemas y el impacto en otros organismos. “Hay que ser responsables con estos productos y no tirarlos a la basura”, señaló.
¿Qué pasará con los medicamentos recolectados?
Los medicamentos recolectados durante la campaña serán sometidos a procesos físicos de trituración y posteriormente enviados a un destino final mediante el coprocesamiento en Horno Cementer. Este método implica la destrucción térmica con ganancia de energía, aprovechando la energía contenida en los medicamentos como “combustible alterno” para los hornos cementeros autorizados.
La iniciativa no solo busca prevenir la contaminación ambiental sino también fomentar la responsabilidad y conciencia en el manejo adecuado de los residuos farmacéuticos, contribuyendo así a la preservación de la salud pública y del medio ambiente.
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Con información de Publimetro.
