Alerta sobre una elección de Estado y llama a la participación ciudadana para evitar que la fuerza del estado y de la delincuencia “autorizada” se antepongan al bien común.
En un mensaje que resuena con urgencia y preocupación, Guadalupe Acosta Naranjo, reconocido integrante del Frente Cívico Nacional y representante del PRD ante el Consejo Nacional del INE, lanza una alerta contundente sobre los peligros inminentes que acechan a la democracia mexicana. Su análisis, detallado y apasionado, ofrece una radiografía crítica de la actual situación política del país, destacando la gravedad de lo que él caracteriza como “la elección de Estado más dura del último siglo”.
Antes de adentrarse en las circunstancias actuales, Acosta Naranjo ofrece un breve recuento histórico de la importancia de la democracia en México y cómo, a lo largo de los años, se ha luchado por construir un sistema político basado en la participación ciudadana y el respeto a las instituciones.
Síntomas de una crisis democrática
Desde su perspectiva, los primeros síntomas de la crisis democrática actual se manifiestan en la actitud del Gobierno de la República y del propio Presidente. Acusa al Ejecutivo de convertirse en “el principal violador de la Constitución y de la Ley” al buscar favorecer a Morena y su candidata en las elecciones venideras. Esta afirmación sienta las bases para el análisis crítico de las recientes decisiones y acciones que, según Acosta Naranjo, amenazan los pilares de la democracia mexicana.
El mensaje aborda detenidamente la resolución reciente del Tribunal Federal Electoral, señalando esta decisión como un indicador claro de la inquietud del Presidente ante los resultados electorales potenciales. Acosta Naranjo arremete contra la ampliación de facultades concedida a la Presidenta del INE, argumentando que esto representa un intento flagrante de cooptar los órganos electorales y desequilibrar la balanza en favor de intereses de la candidatura oficial.
El representante del PRD proyecta las implicaciones de estas acciones hacia las elecciones de 2024. Prevé una batalla electoral intensa y señala la figura de la Presidenta del INE como una pieza clave en este escenario. Sostiene que la carencia de respaldo mayoritario del Consejo General del INE para la presidenta actual es indicativa de los desafíos que la democracia enfrentará en el futuro próximo.
En un punto álgido de su discurso, Acosta Naranjo arroja luz sobre una preocupación adicional: la presunta vinculación entre el Gobierno y la delincuencia organizada. Utiliza la expresión “delincuencia autorizada” para describir una colaboración que, según él, ha transformado la criminalidad en un instrumento de poder. Sostiene que el Gobierno actual no solo ha permitido sino también utilizado a grupos delictivos para alcanzar sus objetivos, generando un escenario peligroso donde la seguridad.
Participación ciudadana: La clave para detener el asalto a la democracia
El discurso toma un giro hacia el llamado apasionado a la participación ciudadana como la fuerza más determinante para detener lo que Acosta Naranjo describe como un ataque sistemático a la democracia. Subraya la capacidad innegable de los ciudadanos para vencer esta presunta manipulación y lograr la hazaña de ganar la elección. Insta a respaldar a Xóchitl Gálvez y a todos los candidatos de la oposición, destacando que es la sociedad civil la que puede marcar la diferencia en la lucha por la democracia.
La parte final del mensaje se centra en una convocatoria masiva a la ciudadanía para participar en una marcha programada para el 18 de febrero, con un recorrido desde el monumento a la Revolución hasta el Zócalo de la Ciudad de México. Acosta Naranjo subraya la importancia de defender la República, la división de poderes, la democracia y las libertades en el país. Hace un llamado apasionado a los ciudadanos para liderar la movilización, recordando las exitosas convocatorias previas en noviembre y febrero, e instando a proteger el futuro de México con unidad, determinación y conciencia cívica.
El mensaje concluye con un tono de urgencia y determinación, reiterando la importancia de la movilización ciudadana en este momento crítico para la democracia mexicana. Acosta Naranjo cierra su discurso con un llamado a la acción, recordando a los ciudadanos su papel vital en la defensa de los principios democráticos que han sido fundamentales en la historia de México. Su mensaje resuena como un grito de alerta, un llamado a la acción colectiva y un recordatorio de que, en última instancia, es la sociedad civil la que tiene el poder de determinar el destino de la democracia en el país.
