Rosario Robles afirma que su encarcelamiento fue una venganza política

Rosario Robles dejó clara su postura sobre la prisión preventiva oficiosa, un mecanismo que, en su caso, fue usado por venganza política.

Prisión preventiva oficiosa fue usada como venganza política

Después de tres años en prisión, Rosario Robles Berlanga habla para El Universal y comparte cómo fue su proceso judicial tras ser señalada como una de las principales responsables del desvío de recursos millonarios en las dependencias de las que fue titular durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, caso conocido como la Estafa Maestra.

Entérate: Juez decidirá si el proceso contra Rosario Robles continúa

Robles es firme sobre su postura ante la figura de la prisión preventiva oficiosa (PPO) y asegura que, en su caso, fue usada como venganza política.

“Las prisiones preventivas son condenas anticipadas, te ponen el dedo flamígero sobre tu persona, prácticamente eres culpable cuando no se ha demostrado absolutamente nada. Evidentemente hay casos de venganza, hay casos en los que las razones políticas están más que claras, es obvio y estamos platicando de uno de ellos”.

Si bien está favor de desaparecer la PPO, aclara que lo adecuado es que la decisión de privar a una persona de su libertad debe hacerse bajo el mecanismo de prisión preventiva justificada, donde la Fiscalía deberá ofrecer pruebas y argumentos sólidos para determinar que el presunto inocente debe permanecer la cárcel mientras sigue el proceso.

Años de mucho dolor y rabia

Robles, quien fue señalada de ejercicio indebido del servicio público, admite que los años en prisión fueron una etapa de mucho dolor y rabia por haber sido recluida en Santa Martha Acatitla sin pruebas y acusada de un delito que no ameritaba la PPO.

“Es decir toda esa maquinaria que de repente me cayó encima, un juicio político, una inhabilitación por diez años, cuestiones que hemos ido ganando poco a poco, pero que en ese instante yo sentía mucha impotencia y mucho coraje”.

Compartió su sorpresa ante el fallo del juez de Control Felipe de Jesús Delgadillo Padierna y lamentó que el estigma sobre su presunta culpabilidad mermara en los esfuerzos que, junto a sus abogados, realizó para probar su inocencia.

Visita de Arturo Zaldívar fue un parteaguas

Su experiencia en Santa Martha también incluyó acercarse a otras mujeres presas y conocer sus historias, sobre todo, interesarse por la aplicación del protocolo de la Corte sobre juzgar con perspectiva de género.

“Escuché historias de mujeres que están ahí por venganzas personales, porque normalmente hay una complicidad entre los hombres, este pacto patriarcal que está ahí presente, y utilizan a las instituciones sus influencias, su poder para que una mujer sea privada de su libertad”.

Tras la visita del ministro Arturo Zaldívar, consideró como un logro que se pudiera visibilizar la situación de desigualdad en los casos de mujeres privadas de la libertad y el uso indiscriminado de la PPO. Así mismo, la importancia del análisis del entorno social de la gente que es acusada de algún delito para “no mandar inocentes a la cárcel” y establecer parámetros más estrictos antes de privar a una persona de su libertad.

Robles se dice satisfecha con las conquistas que pudo sumar durante su permanencia en prisión entre amparos, apelaciones y audiencias. La más importante, demostrar que el fiscal Alejandro Gertz Manero violó su presunción de inocencia y su derecho a un debido proceso.

“Después ganamos un amparo, en el que, por unanimidad, las magistradas señalaban que el fiscal Alejandro Gertz Manero había violado mi presunción de inocencia, me debido proceso, es decir todo el tiempo luchando para que se estableciera que yo eran presuntamente inocente y como tal tenía todos mis derechos políticos habilitados, en fin, fuimos ganando batallas que le dieron un vuelco a esta situación”.

AMLO quizá no estuvo debidamente informado

Al volver sobre el tema de una venganza política en su contra, la exsecretaria de Sedesol indicó que quizá el presidente AMLO no esté debidamente informado sobre las consecuencias perniciosas de la PPO y por ello no se incline a que la prisión preventiva justificada sea un mejor recurso y pueda evitar abusos.

“Lo que se está planteando es que este mecanismo haya hecho que muchas personas vayan a la cárcel siendo inocentes. […] El sistema penitenciario se colapsó por el abuso de la prisión preventiva oficiosa”.

Derecho a una segunda oportunidad

Para Rosario han sido tres años de resistencia y seguirá con su proceso hasta demostrar su inocencia. Asegura que, una vez terminado este episodio, podría iniciar procedimientos de reparación del daño ante las autoridades como un asunto de justicia, no de venganza.

Respecto a las presiones por incriminar al expresidente Enrique Peña Nieto, así como otros exfuncionarios de su administración, insiste en que no se prestaría a “una situación de esa naturaleza”. En este sentido, niega tener algún contacto con Peña y admitió que solo ha tenido acercamiento con algunos políticos, sin mencionar nombres.

Sobre si regresará en algún momento a la política, Robles Berlanga afirma que primero deberá terminar el proceso que enfrenta y posiblemente regrese, ya que es lo que sabe hacer.

“No, yo creo que la gente se empezó a dar cuenta de que esta era una injusticia, pero no pienso en este momento en la política yo lo que pienso es primero en disfrutar mi casa, disfrutar a mi hija, terminar con el proceso jurídico, y después ya vemos qué espacios se abren, qué oportunidades se abren, yo siempre he sido una mujer que trabaja por su país, que le preocupa lo que pasa en México”.

Con información de El Universal.

Recommended Posts